lunes, 11 de enero de 2010

Nieve


No sé si es por la nieve o por el reflejo de las farolas sobre ella que imprime una atmósfera como anaranjada a las calles y edificios.

No sé si es porque es de noche y no tengo sueño o porque hoy escucho el silencio de otra manera.
No sé si algo ha cambiado o todo sigue igual.
Ni siquiera sé si al asomarme por la ventana estoy viendo la misma ciudad de siempre o si Madrid se ha vestido de gala esta noche.

...un largo vestido blanco que se deshacía entre el calor de mis manos...

"El silencio de la nieve (...)
Si hubiera sido el principio de un poema, habría llamado a lo que sentía en su interior el silencio de la nieve".

No hay comentarios: